Por un par de tetas Cap 1 Crecer

Noam un chico de unos doce años, era un niño que estaba deseando hacer muchas cosas y también ser tomado en serio en el colegio siempre era el último en todo, no sobresalía en nada ni por altura, él era muy bajito, ni por fuerte él era muy delgaducho, ni por atractivo el chico tenía el rostro bastante aniñado y parecía que nunca había roto un plato. El chico se levantó muy temprano y fue al sótano, para coger las pesas de su padre, era de las pocas cosas que había dejado en la casa, antes de irse. Comenzó hacer ejercicios que había visto en YouTube, esperaba ganar musculatura por los días, eso es lo que deseaba. Aunque su madre siempre le dijo que nos e preocupara ya cambiaria.

Patience una chica bastante alta de la misma edad que Noam, pelo oscuro y rostro lleno de pecas llego a casa de su mejor amigo, pico un par de veces a la puerta y la madre de su mejor amigo abrió. Nell la madre del chico una mujer de unos cuarenta años, bastante alta y de cuerpo bastante atractivo, sonrió al ver a la chica:


-Noam está en el sótano entrenando, ve hablar con él y después subís a desayunar. 


La jovencita bajo al sótano y vio a su amigo intentando levantar unas pesas, la chica se preocupó al ver aquello, temía que se pudiera hacer daño:


-Noam para te aras daño….


El chico suspiro y miro a su amiga a los ojos:


-No me are daño me are más fuerte, casi todo el mundo del colegio está cambiando para que dentro de unos años sean populares y yo me estoy quedando así, no quiero un estirón lo quiero a hora. 


Patience suspiro y le miro con sinceridad, con mucho cariño:


-Vamos hacer una cosa te vienes a mi casa a ver la lluvia de estrellas  de esta noche y hablamos, ya verás que no importa cambiar para ser especial, tu eres muy especial eres mi amigo.


Noam suspiro al escuchar a su amiga:


-Puff no quiero ser especial quiero tener más amigos….


Patience negó con la cabeza levantando la ceja:


-Puff, yo te cambiaría por un amigo mejor que no se preocupara por esas cosas, es broma vamos a desayunar y preparar las cosas para esta noche. 


Noam asintió con la cabeza y dejo a un lado la pesa que no pudo levantar, cogió su toalla que ni siquiera había usado por lo poco que había sudado. Los dos chicos subieron a desayunar y estuvieron hablando sin cesar como seria la lluvia de estrellas, la madre del chico sonreía al ver como estaba olvidando su intento de crecer tan rápido y como se comportaba como un niño casi un adolescente normal. Al llegar a la habitación de Patience prepararon todo para ver la lluvia de estrellas, el chico dejo su saco de dormir en el suelo y la chica preparo el telescopio. 


-Sabes esta noche se pueden pedir muchos deseos….-Dijo Patience.


Noam asintió con la cabeza:


-Tengo muchos deseos que pedir.


Llego la hora de la lluvia de estrellas y los dos chicos estuvieron viendo ese espectáculo, esa lluvia que era única, los dos se miraron a los ojos sonriendo, Patience cerró los ojos y deseo ser una adulta, quería ser lo que deseaba su amigo, para que siempre estuvieran juntos, el pidió en tener algo diferente, en ser único en algo, en que creciera algo de su cuerpo. Una de las estrellas que caían, una de las más maléficas escucho esos deseos. 


Se fueron a dormir tras la lluvia de estrellas y esperaron que sus deseos se cumplieran, lo más seguro que después que no se cumplieran lo que habían deseado lo olvidarían, ya al día siguiente comenzarían el colegio y estarían pensando en otras cosas. 


Al entrar la luz del día por la ventana rozo el rostro de Patience, la chica de rostro pecoso se despertó poco a poco y se levantó de la cama, sintió algo extraño, todo estaba muy alejado, esl suelo estaba muy lejos ¿Qué había pasado? Se dio cuenta que su pijama estaba muy apretado, estaba rajado. Corrió hacia el servicio y vio que había crecido, su cuerpo estaba apretado, sus pechos habían crecido, su caderas, sus nalgas, sus muslos. La chica se quedó con la boca abierta, no podía ser ¿No puede ser? Soy adulta. La chic asustada fue hacia donde estaba durmiendo su amigo y antes de despertarle vio algo extraño en él, le aparto un poco la manta que le cubría y vio que le habían crecido pechos, pechos enormes. La chica negó con la cabeza. El chico abrió los ojos y miro a Patience:


-¿Pati?


Se miró el pecho, estaba muy apretado, vio por el cuello de su pijama que tenía dos cosas muy apretadas, no podía ser, se lo toco y eran grandes, eran dos tetas, dos grandes tetas. Se quitó la parte de arriba del pijama y las vio como caían por su propio peso:


-¿Qué nos a pasado Pati?


Patience negó con la cabeza:


-Yo soy adulta y tú tienes tetas ¿Qué?