Ani
Jen una joven de unos veinte años se fumaba su ultimo cigarrillo,
sabia que aquello no le aria nada bien, que la nicotina entrara en su
cuerpo, pero lo necesitaba, ya que estaba muy nerviosa, por lo que
estaba apunto de pasar. En plenas navidades en la fría parada del
autobús, la chica de pelo oscuro, cuerpo delicaducho y que llevaba
un abrigo azul, unos guantes, bufanda, pantalones tejanos y unas
botas de piel, ella llevaba muy mal lo que era el frio, mas aun
cuando era 22 de Diciembre y el termómetro había caído en picado
en una ola de frio.
Hubiera
preferido quedarse en su casa con sus madre y pasar una bonitas
fiestas, ella le entendía perfectamente, no tendría que esconderse,
pero que tendría Saly para que se dejara convencer para ir a la casa
de sus padres para pasar las fiestas, era la chica que amaba y quería
pasar toda su vida con ella, ella sabia su secreto y no creía que
sus padres estuvieran preparados para conocerle y menos en saber lo
que era en la profundidad de su cuerpo.
Sally
llego por la calle y saludo a su querida Ani, la chica de pelo rubio,
ojos azules y cuerpo carnoso enfundado en su ropa de invierno, era la
mujer perfecta ya que era todo comprensión. Era la que había
convencido a su novia para pasar las navidades en la casa de sus
padres, para que conociera a la chica que amaba:
-¿Preparada
Ani?
-Yo,
cada vez que lo pienso mas ganas tengo de quedarme en casa, pero todo
esto lo hago porti….
La
chica rubia cogió por los hombros a su novia, le miro a los ojos y
sonrió, su amante le devolvió la sonrisa y sintió como ella besaba
sus labios, al pasar esos deliciosos segundos Ani sonrió al ver el
rostro de Sally con esos mofletes enrojecidos:
-Are
lo que sea por ti cariño, pero sera tan duro.
Llego
su autobús que les llevaría al aeropuerto que les llevaría a
Texas, allí Ani conocería a los padres de su novia, pero le costaba
dar bastante ese paso ya que pensaba que sus suegros estarían un
poco atrasados en entender lo que era realmente, esperaba que al
cenar el pavo no sacaran la escopeta y tuviera que salir corriendo en
busca de la frontera para no recibir un tiro.
Pero
si se había enamorado de la forma de ser de Sally y su forma de ser,
podría tener mas aguante por unos supuestos catetos de pueblo que
tenían una granja en las afueras.
Las
dos chicas se sentaron en un par de asientos, era increíble que a
esas horas hubiera tanto sitio, a diferencia de las horas mas
señaladas que siempre estaba todo a reventar y te tenias que
aguantar quedandote de pie soportando el calor de la gente o como el
chófer cogiera las curvas. Ani suspiro intento dormir un poco, pero
Sally era perversa y cuando apoyo su cabeza en su hombro le susurro
algo al oído, algo que hizo que la joven perdiera el sueño
totalmente:
-Mi
padre es votante de Donald Trump.
Su
novia se giro y cerro los ojos, dejando que que Ani se quedara con
los ojos como platos, una gota de sudor se le resbalo por la frente
“Hay madre”
Ani
intento dormí un par de horas, pero le costaría ya que estaba
muerta de miedo, pero sus ojos le pesaban sin cesar, hasta que se
quedo profundamente dormida, la chica se dejo llevar por morfeo hasta
que escucho un extraño ruido, al abrir los ojos vio a un hombre de
unos cincuenta años, con barbar de tres días, vestido de cazador y
que le estaba apuntando con una escopeta en su rostro:
-Hola
Ani, se lo que eres…
La
chica puso una mueca de miedo y el cazador le hizo un gesto para que
saliera corriendo, quería disfrutar de la aventura de cazar a su
presa, la chica no lo pensó dos veces y comenzó a correr por el
autobús hasta que se lanzo contra una ventana, rompiendo el cristal
y cayo contra el asfalto, comenzó a correr con todas sus fuerzas,
escuchaban los perros y los pasos de mas de un cazador cateto de
Texas detrás suya en plena noche. Hasta que cayo en un charco de
barro, dándose cuenta que estaba desnuda y bañada por el barro,
intento moverse y salir pero al intentarlo el cazador estaba frente a
ella y le estaba apuntando:
-Toma
plomo….
Cuando
se escucho el disparo Ani se despertó de golpe y miro a su novia que
estaba durmiendo junto a ella, la chica lanzo un suspiro y acaricio
el rostro de su amada, estaba muerta de miedo, pero lo tenia que
superar.
Al
estar a pocos kilómetros antes de llegar al pequeño pueblo de Texas
donde se crio Sally con sus padres hicieron que Ani sintiera como le
subía la tensión,
su corazón no cesaba de latir con fuerza, su novia se despertó y
apoyo su cabeza en el pecho de su amante.
-No
te preocupes tonta, ellos saben que soy lesbiana.
Ani
trago saliva al escucharla, podría ser que supieran el secreto de su
hija, pero quien le contaria aquello que ella escondía,
pensarían
que era una pervertida, solo por eso le sacarían
del pueblo a patadas.
-Si,
si claro cariño pero quien le contara que yo realmente soy, soy……
Ella
sonrió cogiéndole
con cariño la barbilla a Ani y moviendosela con cariño, haciendo
que sus miradas se entre cruzaran con una sonrisa:
-Sabes
lo que consigues, consigues que me relaje, no me dejes a solas con
tus padres…
Al
llegar a su destino allí estaban en la parada del bus Tom un hombre
de unos 50 años, físico robusto, bastante algo, con una camisa de
cuadros, pantalones estrechos, todo un hombre Texano, a su lado esta
Felisa una mujer muy atractiva de la misma edad que el, rubia
voluptuosa, blusa blanca, falda muy corta.
Sally
bajo del autobús y abrazo con fuerza a sus padres, ellos miraron a
su querida hija y su padre solo quiso preguntarle una cosa, por su
famoso invitado, la novia de su hija:
-¿Cariño
y tu novia?
La
jovencita miro a su padre y a su madre con una sonrisa en los labios:
-Gracias
papa, gracias mama por respetar mi lesbianismo, allí esta es Ani, mi
querida Ani.
Tras
de ella estaba Ani forzando una sonrisa nerviosa y sintiendo como una
gota de sudor se resbalaba por su frente, estaba ante lo que mas
temía:
-Hola
señores, soy Ani….
Tom
se acerco a ella y le dio la mano, la jovencita sintió esa gran mano
rodeando su pequeña mano y le miro a los ojos:
-Me
puedes llamar papa cariño…