Me levante de la cama lentamente y le mire con una afilada sonrisa en mis labios, le cogí fuertemente de su larga melena rubia, le di acaricie su redondo rostro, le bese lentamente, ella se quedo en silencio ya que estaba disfrutando de ese beso. En el fondo me estaba amando y en el fondo le dolía verme auto destruirme.
Le puse frente de su rostro mi mano y ella suspiro ya
que sabia lo que quería, hizo que apareciera unos gramos de farlopa, lo mejor
de lo mejor, sin adulterar. Me lleve la mano a mi nariz y lo esnife todo lo que
podía. Estaba hiper excitada.
Con todos los efectos que podía darme las drogas,
estaba preparada para follar como loca, estaba preparada a desconfiar de
cualquiera, desconfiar de quien me quitara el placer del sexo.
Dina asintió con la cabeza ya que sabia lo que
necesitaba, vestir con mi mejor ropa, la mas provocativa, las mas corta, era
como ir desnuda, para tapar pezones y mi vagina, solo por agacharme se podía
ver mi perfecto culo.
Ella se quedo sentada en la cama al ver cómo me movía
por la habitación, con mis perfectos tacones, hasta salir de mi pequeño piso,
ella dio una palmada y todos los consoladores, juguetes sexuales que estaban
tirados por el dormitorio se ordenaron en las estanterías.
Chasqueo sus dedos y se vistió con una blusa blanca,
bastante escotada, falda muy corta, unos tacones no muy altos, sobre todo una
gabardina, un sombrero y unas gafas de sol. Iría a ver lo que yo hacía, sabia
mis desfases e intentaría que no muriera en el intento, si podía curarme, podía
salvarme de algún accidente lo aria.
Ella entro en el pequeño disco bar y se sentó en un
taburete, pidió una copa a la camarera y comenzó a buscarme con su mirada. En pocas
horas me había bebido unas cuantas copas invitadas por los dos hombres que
estaba liadas en un rincón, bebía y bebía, mis dos amantes me tocaban los
muslos, me tocaban las tetas y las caderas. Yo me reía sin cesar, borracha y
drogada.
Dina chasqueo los dedos para rebajarme el nivel
peligroso de alcohol y drogas en mi sangre, manteniendo mi colocón, era casi
inmortal gracias a ella. La voluptuosa chica rubia lanzo un largo suspiro al
ver como me levantaba torpemente, cogía de las manos a mis amantes y me los
llevaba al servicio.
Para follar sin cesar, no tenían tan mala pinta, ya
que eran dos imbéciles salidos del gimnasio y que le había tocado el premio
gordo conmigo.
Dina fue hacia el servicio y abrió la puerta del
servicio de chicas lentamente, pudo ver por la rendija, como yo me comportaba
como una actriz porno, jugando con dos penes, grandes duras y yo tan borracha
que deseaba hacerles una felación, abriendo mi ano, abriendo mi vagina, para
que vieran mis labios vaginales, para que olieran por donde podían penetrarla y
que deseaba ser penetrada. Manoseaban mis pechos, apretándolos tanto que hacia
que unas gotas de leche materna se resbalaran por ellas.
Abrí los ojos como platos al sentir como me penetraban
doblemente analmente, como uno se apropiaba de mi culo, otro de mi coño, solo
se escuchaban mis gemidos como una cerda.
Al ver un ojito que nos observaba por la rendija de la
puerta, yo la golpee para cerrarla, dentro de las posibilidades que tenia para
mover mis extremidades, entre manos, músculos y pollas:
-No, nos espíes zorra...
Ella suspiro al ver aquello y solo escucho como algo
liquido golpeaba la puerta, sin saber que yo me resbalaba por ella, hasta
llegar al suelo, mojada de sudor, de saliva, de líquidos vaginales y semen.
A ultima hora de la noche, en un descampado, estaba tirada
en el suelo de rodillas, con mi rostro pegado contra el suelo, con mi lengua
lamiendo la tierra, estaba sudada, sucia y tenia una pequeña cola de hombres
penetrando mi ano. Estaba agotada, estaba destrozada por dentro.
Al final caí contra el suelo, mi culo, mis caderas
estaban agotadas, me abandonaron allí. Dina se acercó a mí, se puso de
rodillas, me cogió el rostro lentamente, levantándolo para que le pudiera ver:
-Ya basta Raquel, Raul, ya basta….
Negué con la cabeza:
-Venga, límpiame, pone otro traje, quítame la
borrachera, haz que este como una rosa para que continúe la fiesta, vamos…….
Le dije llena de rabia, no quería parar, quería
hacerlo hasta agotarme, físicamente, agotarme mentalmente. Mi Genio suspiro y
chasqueo los dedos, me vistió y me dejo como nueva:
-Te espero en casa-Dijo Raquel.
Me quite la ropa, desnudándome, mientras entraba en
aquella habitación, pude ver a mi alrededor, cinco camas redondas enormes,
llenas de gente, practicando sus orgias, me acerque a una de ellas y deje que
manos masculinas, femeninas me acariciaran y me metieran dentro con ellos,
comería coños, comería pollas, seria penetrada hasta la saciedad.
Mientras me penetraban, mientras me metían una polla
en la boca, mientras que dos mujeres lamian mis pechos, mis ojos llenos de
aburrimiento pude ver que en las paredes de la gran habitación habían
televisiones, se podían ver películas porno. Mientras cabalgaba a uno de los
participantes, sonreí al ver que si tenia un cuerpo como ese, podría ser una
estrella del porno, aparte mire a mi alrededor mientras que me cogieron por mi
culo y me penetraron analmente, me di cuenta el mundo que estaba metida, el
tedio de sexo por el sexo, viendo en esas teles que podría ser una artista.
Dina se quedó sentada en el sofá, tomándose un café,
esperando que viniera, estaba entristecida y preocupada por mí. Se escucho la
puerta de mi casa y entre lentamente, me acerque a ella bajando mi cabeza, por
vergüenza:
-No se que me paso, estoy tan avergonzada Dina….
Ella me abrazo con fuerza, sintiendo sus grandes
pechos apretando los míos, tanto apretaba por lo emocionada que estaba que
hacia que mis senos salieran de mi escote. Que hacia que mi ropa se resbalara
por mi cuerpo, dejándome desnuda frente a ella, sin sujetador ni bragas, solo
los tacones medio tapados por mi ropa que estaba tirada en el suelo:
-Te quiero tanto, me destrozabas al ver como te
destruías lentamente.
Cuando ella se separó de mí, vi mi cuerpo desnudo, era
mi estado natural casi, me acerqué a ella y le cogí de las manos:
-Dina, quiero ir a los Ángeles, quiero ser una actriz
porno, follar con respeto y ser una estrella, quiero que tu seas quien me lleve
mis negocios…Vamos a devorar Norteamérica.
Dina chasqueo los dedos y aparecieron maletas frente a
nosotras, seria la ropa que llevaríamos a los Ángeles, ropa que no había visto
y que ella mágicamente había elegido para nosotras, yo asentí con la cabeza:
-Bueno no sabia que tenia tanta ropa femenina……
-A hora la tienes-Dijo Dina.
Ella dio una palmada y aparecimos en el avión hacia
Norteamérica, los Ángeles, un punto caliente de la industria del porno,
estábamos sentadas en primera clase, con unas copas de champan entre nuestras
manos.
Yo brinde con ella y le mire a los ojos:
-Dina tengo que pedirte perdón por estos meses, quería
destruirme, por no tener un futuro, pero al saber que este cuerpo valía para el
sexo se que podre tener un futuro…..Gracias por aguantarme.
La genio sonrió brindando conmigo y le dio un trago a
su copa, ella también tenia una idea para que yo fuera la actriz porno más
importante:
-Tengo una idea Raquel ¿Por qué no eres mas de una
actriz porno? Podríamos dominar diferentes frentes, las lolitas, las milf, las
lesbianas……Te puedo transformar en mas de una mujer, cuando la industria esté
preparada podría saber que la gran Raquel Miracle se puede transformar….
Yo asentí con la cabeza mientras le daba un trago a mi
copa:
-Me gusta ese apellido, me encanta ser mas de una
mujer para el porno, me encanta ¿Espera la gente que nos rodea habrá escuchado
nuestra conversación, como sabes tanto de porno?
La genio sonrió:
-Raquel, use uno de mis poderes para que la gente
piense que hablamos de cosas simples como el tiempo, en mi lampara tengo muchas
cosas que hacer, una tiene muchas cosas que hacer y tengo un buen internet, hay
tanto porno…
Asentí con la cabeza:
-Venga enséñame los cuerpos….
Dina me miro a los ojos y sonrió, me cogió de la mano
y la acaricio con sus deditos, con sus deditos rechonchos blanquecinos:
-Esas jovencitas de pelo rubio que parecen que tienen
menos de 18 años, con cuerpos delgaduchos, cuasi parecen adolescentes y que
tienen 20 añitos, Lolitas.
Ella chasqueo los dedos y mi cuerpo se volvió más
delgado, comencé a disminuir, perder peso, mi piel se volvió mas blanca, mi
rostro mas aniñado, mi pelo se volvió rubio. La ropa que llevaba se fue
transformando para adaptarse a mi cuerpo, mi cuerpo de lolita. Mire mis manos
fascinadas:
-Wow soy una cría ¿Crees que tengo 24 y parezco que
tengo menos de 18? Mi voz es mas chillona.
Dina me dio un espejo y me respondí todas las
respuestas:
-Raquel Star siendo una lolita podría llamarse por a
hora Loli Gatita, hasta que descubramos a todos que puedes transformarte
¿Preparado para otro cuerpo?
Yo asentí con mi cabecita, ella volvió a chasquear con
sus dedos y mi cuerpo se volvió a hinchar, era parecido a mi cuerpo original,
pero mas marcado por la edad, llegando a los 50 años, piel algo mas arrugada,
mas estirada por la silicona, por los muslos y enorme culo, piel bronceada,
pelo oscuro, rostro marcado por la edad, pero aun atractivo, era una milf. Mi
ropa se adaptó a mí, americana marrón, blusa blanca escotada, falda corta y
ajustada Me mire las manos, me acaricie el rostro mientras me miraba en el
espejo, con esos labios tan hinchados, todo para resaltar mi belleza con la
edad:
-Wow, me siento hinchada, silicona, horas de gimnasio
para resaltar mi cuerpo a esta edad, puede ser que tenga 48,49 o 50 años.
Dina asintió con la cabeza y me dio unas gafas de
pasta, me tiro un poco de mi pelo recogiéndolo, para que pareciera una
profesora, más morbo milf:
-Raquel Ann, la reina de las milf… ¿Preparada para
otro cuerpo?
Ella chasqueo los dedos y mi cuerpo de volvió algo mas
pequeña, mas joven, se llenos mis hombros, mi cintura, mis piernas de tatuajes,
aparte que se musculaba bastante, mi pelo se volvió mas corto, mi ropa
cambiaba, camiseta de tirantes, pantalones tejanos rotos y botas. Me mire al
espejo, tenia pinta de chica con toques más andróginos, me mire mi fuerte
brazo:
-Soy una queer, una lesbiana andrógina y fuerte…Me
gusta.
Dina paso su mano por mi pierna:
-Una lesbiana fuerte que puede hacer realidad los
sueños de las lesbianas mas extremas.
Asentí con la cabeza y sonreí:
-Are solo cine lésbico hasta que olvide mi pasado,
quiero olvidar…
Dina asintió con la cabeza y me beso en los labios:
-La reina Queer llamada Andrea Destroyer ¿Quieres
practicar esos cuerpos conmigo? En el servicio, tenemos tantas horas de vuelo.
Recuerdo que cuando me cansaba con cualquier cuerpo
Dina me recargaba las pilas, ella hacia lo mismo con ella, sudor, jugos
vaginales, saliva y a veces yo era quien mandaba con el sexo, como la super
lesbiana, como la milf o como Raquel Star y después era ella, aprovechándose de
mi cuerpo de lolita, que al compararse con su cuerpo carnoso yo era demasiado
delgada y frágil.
Era imposible que abrieran la puerta del servicio,
estaba bloqueada por los poderes de Dina, los pasajeros se pasaron todas las
ultimas horas de vuelo acudiendo a la clase turismo para hacer sus necesidades,
aparte de eso la música apagaba nuestros jadeos.
Al llegar al aeropuerto, salimos del servicio tan
frescas como rosas, ella mi ayudante, mi secretaria mi genio paso hacia delante
mía, hasta llegar a la salida del avión, para poder ver la escalera de bajada,
ella me dio unas gafas de sol al cegarme la luz solar, era molesto después de
horas de vuelo y no tener contacto con la luz natural, más allá de la luz
artificial.
-Dina es increíble, estamos en los Ángeles.
Ella bajo por las escaleras y me cogió de la mano para
que la siguiera, tras traspasar el aeropuerto, la gente nos observaba ya que
éramos una pareja bastante deliciosa, una morena de cuerpo de escandalo y una
rubia de tetas increíble y culo tentador, con ese rostro aniñado.
Me quede asombrada al ver que nos esperaba en la calle
una inmensa limusina, yo mire a Dina y ella golpeo la chapa de ese gran
automóvil, haciendo que saliera un inmenso chofer de dos metros, cuasi tan
grande como un armario, un enorme hombre negro, vestido de traje blanco marcaba
su cuerpo musculoso, aparte de eso llevaba un gorro para taparse su cabeza
rapada. Miré a mi genio y traje saliva mientras nos abría la puerta:
-Joder, joder que bien que dejado por el momento el
sexo hetero, pero creo que este tío me taladradaria…Uff viva el lesbianismo…
La voluptuosa chica rubia entro en la limusina y me
miro para que entrara:
-No te lo tienes que follar cariño, el es mi mano
derecha para llevarnos o llevarte a los rodajes, sube Raquel.
Las dos chicas al ser paseadas por los ángeles, se
quedaron fascinadas, por ver la zona mas bonita y glamurosa de la ciudad,
aunque Raquel tendría que hacerle una felación al glamour y dejar que la
penetrara por sus orificio para hacerse un lugar en el mundo del porno
Norteamericano. Dina por su parte nunca había visto mas allá de su lampara, ya
le fascinaba Viladecans, pero esto era mas grande.
Llegaron a una gran mansión, el inmenso chofer negro
les abrió la puerta y las dos mujeres se quedaron alucinando, era un lugar
increíble, era mas grande que el apartamento de donde venían las dos. El hombre
les miro a los ojos y Raquel cogió de los hombros a Dina, ya algo tan grande le
daba miedo:
-Señoritas, les esperare mañana…
Raquel miro a Dina a los ojos mientras que el chofer
se iba con la limusina:
-Ese tío habla en ingles ¿Cómo podemos entenderlo?
Dina sonrió:
-Escúchame con los oídos cariño, a hora entendemos
perfectamente el inglés, cuando hables en español, la gente que hable en ingles
te entenderá perfectamente.
Al entrar en aquella casa, sentí fascinación con el
buen gusto que tenia mi genio, era mas grande que mi pequeño apartamento,
aparte de tener dos pisos, un jardín y tenia piscina, tenías muebles y
electrodomésticos muy caros. Me lleve la mano al pecho mientras que la
voluptuosa genio paseaba por mi lado con una sonrisa en sus labios, ella se dio
cuenta que me llenaba de algo de fe en todo aquello:
-¿Estas contenta Raquel? Para ganar hay que invertir
-Yo, yo Dina sufría que esto era una locura, pero al
ver todo esto, hace que piense que tengo un futuro más allá de estar follando,
borracha y drogada….
Al día siguiente me di una larga ducha y totalmente
desnuda me mire al espejo, era un día interesante para ya que tenia que
demostrar para algunas productoras que podían contratar algunas actrices
nuevas, todas eran yo, pero tiempo al tiempo, todos sabrían que todas eran yo.