lunes, 17 de agosto de 2020

Hermandad Sexual Cap 2 Secretos

Alexandra Daddario es Raul/Alexandra

Me pase toda la noche en vela, quería intentar hacer aquello, quería intentar aumentar las mujeres de nuestra hermandad, mire a Millie y vi que lanzaba ligeros ronquidos, eran pequeños y casi no se podían escuchar. Le puse la almohada para que no se despertara, me puse mi toga para tapar mi desnudez y fui a la gran sala de la hermandad.

Vi en la gran estantería los libros que se habían escrito sobre nuestra hermandad “ SexGamma” Una hermandad que parecía que se creo hace dos días, pero teníamos una historia de varios siglos, como los primeros años de la universidad. Hay debería estar el hechizo que usaron para transformarme en mujer.

Mire los libros pero no encontraba el hechizo, no podía ser que fuera todo por la orgía que hicimos ¿Pero como lo hicieron?

-Maldita sea, pero que clase de hechizo usaron para transformarme gracias a la orgía…..

Mientras estaba con los libros, repasándolos uno a uno, viendo la historia de la hermandad, escuche unos pasos, al girarme vi a Miley que llegaba de tomarse unas copas en un bar del pueblo, no vestía como yo se había puesto unos tejanos apretados y una camiseta de tirantes, ella sabia que era una cabezota y que estaría buscando:

-Pero que tenemos aquí Alexandra ¿Que estas buscando?

Levante la ceja mirándola, estaba algo enfadada aun después que mi sexo no valiera la pena, me metieron nuevamente una polla y no valió la pena, eso me cabreaba bastante:

-Pues estoy repasando la historia de esta hermandad y por que no me subís de nivel, folle mas que una actriz porno….Pero disfrutáis no dejándome evolucionar…..Hijas de….

Ella sonrió al escuchar mis palabras y cerro el libro que estaba leyendo:

-Vaya desde hace unos meses el fotógrafo atontado, se transformo en una mujer con mucho carácter.

Me acerque a ella y pose mis cabeza contra su frente, podía oler su piel, el olor de su aliento que olía a tabaco y cerveza, mis pezones que se marcaban en mi toga se pegaban contra su camiseta de tirantes:

-Perras os di todo, os di mi sexo y me transformasteis a hora quiero que me toméis mas en serio, si no lo hacéis descubriréis lo mala que soy.

Ella me cogió fuertemente de mis morros apretándolos como si fuera un pez:

-Solo te voy a dar una pista, el libro de oro lo tiene escrito, pero no lo tiene escrito…

Ella me soltó y baje mi mirada enfadada:

-Cuantas estupideces….

Ella me dejo a solas y deje los libros nuevamente en su sitio, me volví a mi cuarto con Millie, ella había notado mi falta ya que la almohada era muy fría, me miro sonriendo:

-Cariño siempre te obsesionas con todo, ven acuéstate conmigo, por favor….

Me quite mi toga y desnuda me acosté a su lado, le acaricie la cabecita y le bese la frente, mientras pensaba en la pista que me había dado Miley:

-Escucha bien pequeña, el libro de oro lo tiene escrito, pero no lo tiene escrito…

En los sótanos de la hermandad teníamos unas aguas termales, con un acabado a la vieja Grecia de mármol blanco, allí pasábamos unas horas al día, bañándonos en sus aguas o pasando unas horas en la sauna. Estábamos yo, Selena y Miley tumbadas en la sala, nuestros cuerpos desnudos y que brillaban por el sudor. La joven Millie que estaba también desnuda le encantaba ocuparse de nosotras, bañaba nuestros cuerpos en aceite y los masajeaba con cariño. Poso sus manos en mi espalda, acariciándola y apretándola, sintiendo como crugian algunos huesos, dándome algo de placer, por esos dedos milagroso, después apretaba mis glúteos, eso hacia que me mordiera mis labios, por el placer:

-Si cariño.

Me gire un poco y vi como ella estaba poniéndole aceite en la espalda a Selena, yo sonreí y me levante para esta vez hacerle el masaje yo misma, me acerque a Millie y le acaricie el rostro:

-Dejame a mi tu ve a bañarte…

Me acerque a Selena me frote las manos y comencé a repartir el aceite en su cuerpo, en su espalda, sus glúteos, antes que comenzara hacerle el masaje me fije que Miley estuviera dormida, estar en la sauna le relajaba tanto que se quedaba profundamente dormida.

Apreté la espalda de Selena y sentí como crugian sus huesos, sentí unos gemidos de la chica de raíces mexicanas, estaba disfrutando de mis dedos. Pose mis rodillas a los lados de su espalda, para poder masajearla mejor, posando mi trasero contra el suyo.

-¿Estas disfrutando? Seguro que disfrutas mas por ver como me follan y dejándome siempre como una estúpida, lo hice todo por vosotras…..

-Alexandra, que dedos tienes, se nota que has aprendido de tu novia Millie….

Sonreí al escucharle:

-Ella es pura bondad, pero lo que conseguisteis de mi es llenarme de odio, jodidas……

Pose mis manos en su cuello y ella se derretía con el gusto de tocarle los sitios perfectos, yo seguí intentando que me dijera algo del hechizo:

-¿Que hechizo usasteis en mi transformación en plena orgía?

Ella sonrió al escucharme:

-¿Quieres que te cuente lo mismo del libro de oro?

Yo me levante enfadada y salí de la sauna, me estaban tomando por estúpida y eso no lo soportaba, Selena miro a Miley y esta esta de despertó, las dos sonrieron ante aquello. Al salir me encontré en la piscina de agua termales estaba Millie relajada y dejando que su cuerpo flotara, me metí poco a poco para estar a su lado.

Al estar sumergida en las aguas termales, tan calientes y perfectas me acerque a mi amada adolescente y le cogí de la cintura, pose mi cabeza en su hombro, ella sonrió al sentir que estaba a su lado, sentía mis pechos contra su espalda, mientras que flotábamos en el agua las dos juntas:

-Piensa Alexandra, el libro de oro lo tiene escrito, pero no lo tiene escrito, busca un libro de paginas de oro y en su lomo seguro que esta escrito lo que estas buscando….

Yo sonreí al escucharla, hice que se girara para ver su rostro y sonreí, le comencé a besar fuertemente, ella tenia razón:

-Si, si puede ser y creo que se que libro es……

Ella poso sus brazos en mi hombro, yo pose los mis míos en los suyos y comencemos a besarnos con cariño.