lunes, 30 de marzo de 2020
Experimentos femeninos militares
No sabia nada de los
experimentos que hacían en la base militar de las afueras del pueblo donde
vivo, pero al final todo mi mundo hizo que me ligara a esos experimentos. Soy
Mike y tengo 20 años vivo en este pequeño pueblo donde no pasaba nada, muchos
años sin que pasara nada interesante hasta que llegaran los militares al
pueblo. Muchas veces nos quedábamos yo y mis amigos en el pequeño bosque de al
lado de la base militar hablando de lo que estarían haciendo hay. Un chico nos
recordó que habia una entrada secreta de cuando estaba la antigua fabrica y lo
mas seguro que los militares no lo habían cerrado. Yo y unos amigos entremos
una noche, un amigo hizo mucho ruido en la entrada con su coche para que los
militares fueran a ver lo que pasaba. Al entrar vimos cientas de maquinas, lo
que mas me intereso de todo eso fu unas cajas que estaban encima de una mesa.
Mis amigos me dijeron que teníamos que irnos de allí, pero yo no les hice nada
de caso y cogí una de las cajas. Al final salimos de allí. En casa cogí mi caja
de herramientas y comencé a trastear con la caja, hasta que al hacer un agujero
en la caja un gas salio y me dio en todo el rostro, un gas de color rosita.
Comencé a toser sin cesar hasta que me caí desmayado. Por la noche me sentí
fatal y me metí en la cama muy mareado, miraba a todos lados hasta que mi
mirada se dirigió hacia un póster que tenia pegado en el techo sobre mi cama,
sonreí y me quede casi hipnotizado por ese póster. Nunca lo habia mirado de esa
manera. Hasta que sentí que mi cuerpo comenzó a cambiar, sentí que mi cuerpo
encogía, se retorcían los huesos, se rompían para volver juntarse esta vez mas
pequeños, mis músculos encogían, mi piel se estiraba. Mi pelo creía sin cesar y
sentí como me crecian mis pechos, mis caderas se volvían mas anchas, mis muslos
se hinchaban, como mi culo, perdí todo el pelo de mi cuerpo. Aquella noche
llegaron los militares y me llevaron a la base militar. A hora estoy recluida
en una pequeña habitación, soy esa chica del póster y descubrí que los
militares están experimentando para meterse en las filas enemigas con cuerpos
femeninos. Mirando un póster, foto o un video se podían transformar. A hora
siguen experimentando conmigo.
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