El chico comenzó a llamar sin cesar, pero ella no cogía su móvil, eso le hizo preocuparse. Se levanto de la cama y rebusco algo de ropa interior en su mesita de noche, se puso unos calzoncillos mientras esperaba que ella se pusiera, que le hablara.
Suspiro al colgar, solo esperaba que la próxima vez que llamara, pudiera hablar con ella, cogió el móvil y le mando un WhatsApp "Melinda, que paso ayer por la noche ¿Dónde estás?" Sintió algo de dolor en el pecho, un extraño malestar en todo su cuerpo. Sintió como su cuerpo se hinchaba lentamente, vio como sus músculos comenzaban a crecer, sintió como comenzó a crecer sin cesar.
Sintió como sus huesos crujían, el sonido de sus músculos hinchándose, como sus venas se marcaban llevando sangre a esta apretada musculatura que no cesaba de crecer. Cerro con fuerza los dientes, las manos, su pelo comenzó a crecer, mientras su rostro se comenzó a transformar volviéndose más femenino, hinchándose los labios. Comenzó a crecerle los pechos, a endurecerse su estomago a marcarse sus abdominales. Su culo comenzó a hinchase con su musculatura, sus caderas comenzaron a expandirse.
Comenzó a gritar con todas sus fuerzas, su voz comenzó a volverse mas femenino, mientras su pene comenzaba a desaparecer lentamente. El dolor parecía que había cesado, pero algo le había pasado, le había transformado en algo.
Se miro sus manos, eran más grandes, pero aun así extraños, por que eran como si fueran femeninos. Se toco el rostro, su largo pelo, su fuerte cuello. Apretó sus grandes pechos de chica musculosa. Por ultimo se llevo las manos por debajo de sus apretados calzoncillos y se quedo sorprendida al tocar una vagina, un poderoso musculo vaginal.
La chica salió corriendo de su habitación y se metió en el servicio, pudiendo ver lo que era a hora, era una chica de 1,90 de pelo castaño claro y de gran musculatura.
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