Se
quito las medias y espero a ver lo que pasaba, su cuerpo comenzó a
encoger y se transformo en su sobrina, con su misma ropa, sonrió al
ver su diminuto cuerpo, tenia que seguir experimentando, fue a la
habitación de Karen y cogió unos pendientes que estaban encima de
su mesita de noche, al ponérselos
su rostro se transformo, se miro al espejo de pie y vio que era su
sobrina con el rostro de niña de su hermana. Era como ver a su
hermana cuando era pequeña, estos poderes eran increíbles.
Peter
volvió a su cuerpo original y se guardo en el cajón de su armario
la pulsera de su sobrina, también los pendientes de Karen
junto a la goma del pelo de aquella chica que había hecho que
descubriera sus poderes. Al hacerlo escucho la puerta de casa, ya
había terminado la película y habían llegado a casa su hermana y
su sobrina.
El
las saludo y su sobrina se acerco a el, le miro a los ojos sonriendo
ya que había disfrutado bastante de la película:
-Tito
vimos una película muy divertida….
Karen
asintió con la cabeza:
-Vimos
la loca fraternidad, estuvo divertida.
Peter
miro a su hermana y sonrió, imaginaba a su hermana cenando en un
tugurio y teniendo el final de la cita en la parte de atrás de un
coche:
-Si,
si leí la critica...¿Te quieres acostar yo me encargo que la
princesa se duche?
Su
hermana suspiro asintiendo con la cabeza:
-Gracias
hermanito eres genial.
Al
día siguiente Peter se levanto temprano quería hacer algo de
deporte y seguir
aprovechando sus poderes, antes de ir a la oficina por la tarde, al
levantarse e ir a la cocina para prepararse un café se encontró una
nota de su hermana “ Peter vamos a la piscina” Se tomo el café y
fue a su cuarto, abrió el cajón y miro sus posibilidades
para transformarse.
Quería
hacer deporte y sonrió, quería ser la adolescente, se puso la
pulsera y sintió como su cuerpo se transformo en la chica
adolescente, vestida con ropa deportiva que marcaba sus curvas,
flexiono un poco sus piernas, hizo algunos ejercicios con sus brazos
para darse cuenta que le sobraba energía siendo una chica tan joven
que podría ser que tuviera 16 o 17 años.
Abrió
la puerta de casa y salio a correr, sentía que era rápida,
no sentía como sus pechos no votaban como ella pensaba ya que
llevaba un sujetador deportivo, sentía como su culo respingón
carnoso votaba sin cesar. Se paro frente al semáforo
que estaba al lado de su casa y escucho una voz tras de ella:
-Hillary
¿Donde estabas?
Peter
se dio cuenta que ese cuerpo que tenia a hora se llamaba Hillary se
llevo la mano al pecho y sonrió:
-Había
salido a correr…..
-Tía
desde que sales con Stu ya no sales a correr ¿Te vienes a nuestro
sitio secreto y hablamos?
Hillary
asintió con la cabeza, Peter ya no sabia como escapar de eso:
-Si,
claro..
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