sábado, 14 de noviembre de 2020

Como agua del mar Cap 3 Encontrada

Theresa Correa es Raul y Carmen Ortega es mi hermana
Ella tenia un gran parecido conmigo, era otra chica de pelo castaño de cuerpo espectacular, que solo llevaba un bikini muy reducido para sus curvas de infarto, se quedo mirando por unos instantes la puerta de la portería, no sabia como entrar, como llegar al piso donde estaba.

Mi hermana se quedo pensativa y toco con sus manos la fría puerta y respiro con calma, una calma apunto de romperse para comenzar a llorar, pero tuvo bastante suerte al abrirse la puerta ya que un vecino salió a pasear el perro, ese hombre se quedo mirando aquella joven que solo llevaba un ajustado bikini. Ella sintió con la cabeza y entro a la portería, sin que le hicieran muchas preguntas, su apariencia hacia que cualquier hombre se quedara mudo por su cuerpazo.

En el apartamento de Ana estábamos bastante a gusto, estábamos agotadas y desnudas, ellas me rodeaban y yo estaba en medio de ese coro de amantes, yo las miraba sonriendo, yo las amaba y por fin era querida por ellas. Le di un trago a mi bebida y le di un beso a Tamara en sus finos labios, mientras que mi mano acariciaba su nuca, su pelo extremadamente rizado y rubio, las dos bajemos la mirada tímidamente. Miré a Ana y sonreí, ella le dio un trago a su bebida y me agarro fuertemente de la cintura, nos besemos sintiendo nuestras lenguas como bailaban en nuestras bocas.

Mari Mar bajo su mirada tranquila, su mirada desconectada siempre de cualquier cosa que fuera la realidad siempre un enigma sus pensamientos, todo bañado en alcohol, ella se puso tras de mi, me cogió de la cintura, me beso el cuello, me acaricio un seno y me dio de beber de su vaso.

Mari Carmen sonrió mirándome y brindo con su bebida, nos miremos a los ojos con una gran tentación, se acercó a mí y me comenzó a besar sin cesar, al despegar mis labios de los míos, yo mire a Lorena que estaba tumbada y desnuda en el sofá, tanto lesbianismo le superaba, no podía conmigo cuando era una mujer tan voluptuosa:

-No chicas, demasiado lesbianismo para mi joder…..

Mire por la ventana y vi como comenzaba a salir el sol, ya habíamos dejado atrás la madrugada y comenzaba la mañana, sonreí y lance un largo bostezo, mi hermana al llegar al piso donde estaba pico a la puerta con sus nudillos. Ana negó con la cabeza al pensar que era raro que alguien fuera a verla a esas horas, miro al grupo de chicas desnudas:

-Vestiros chicas….

Tamara me ayudo a ponerme la parte de arriba del bikini, tiraba fuertemente de sus tiras apretando mis senos, mientras que Mari Carmen me ataba la parte de abajo del bikini, apretando mis glúteos.

Ana se puso su blusa, sus pantalones, sin las bragas y abrió la puerta, se encontró frente a ella a mi hermana, una mujer espectacular en bikini.

-¿Esta aquí mi hermana? La presiento….

Ana le miro extrañada:

-¿Cómo?

Ella no pregunto mas y entro en la casa de Ana, me vio frente a ella y me dio un fuerte abrazo, yo le mire a los ojos sorprendida, su tacto, su forma de ser me parecía tan familiar, algo salió de mi sin entenderlo:

-¿Hermana, eres mi hermana?

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