Pringosa Navidad Cap 1 Salvar el castillo

Samantha Lily es Luz

Había que salvar la navidad, había que salvar el gran castillo del polo norte, era lo que pasaba por la cabeza de Luz día a día, la voluptuosa sirvienta de la reina del hielo Migter estaba muy preocupada por aquello, casi le quitaba el sueño. La chica de pelo oscuro, bastante corto, rostro redondito, ojos rasgados de apariencia asiática, no era muy alta con unos enormes pechos, un culo y muslos carnosos, vestida como una sirvienta,que apretaba sus carnes, junto a otras sirvientas en la gran cocina preparaban la comida de la reina del hielo.

El castillo estaba hecho de hielo, como los muebles y todo lo que rodeaban quien vivía en esas cuatro paredes como en las tierras de la reina del hielo, hombres y mujeres estaban tan calientes en su interior que estaban preparados para vivir en esas condiciones, una piel muy dura hacia que superaran el frio extremo.

Samantha Lily es Luz

Luz preparo la sopa y la sirvió en una sopera, una de sus amigas se acerco a ella, era Maya que tenia un cuerpo muy similar, carnoso como ella pero era rubia, la grasa y los kilos de mas era algo que tenia todas las mujeres del país del hielo y la navidad para superar mejor el frio, también vestía de sirvienta:

-¿Que te pasa Luz?

Luz miro Maya a los ojos bastante preocupada:

Beth Lily es Maya

-Ains, no lo ves el castillo, nuestro mundo se esta deshaciendo, aparte de eso ¿Como se celebrara la navidad,como?

Maya comenzó a partir el pan y miro a su amiga:

-Dice la leyenda que se tiene que hacer orgías lésbicas en las plazas del castillo para salvarlo y salvar la navidad, el calor de chicas muy especiales, sus orgasmos, su calor, su sudor hace que el castillo dure miles de años mas y se pueda celebrar la navidad, solo hay que encontrarlas, pero son muy especiales, dicen que la mayoría son tg.

Luz puso la sopera en un carrito y miro a su amiga, estaba sorprendida ante lo que había escuchado:

-Maya ¿TG?

Maya puso el pan en el carrito:

-Son chicos que se transformaron en mujeres, dicen que sus nuevas carnes femeninas son perfectas para esas grandes orgías.