Como agua del mar Cap 1 Mi mundo cambio

Theresa Correa es Raul

Hola me llamo Raúl y os contare una pequeña historia que me paso no hace mucho, la cosa es que todo esto que os contare cambio mi vida, cambio mi vida y mi cuerpo para siempre, cosas que no creareis pueden pasar en mi historia, cosas muy femeninas. Primero os presentare a mis tres amigas, que estarán conmigo, puede ser que me utilicen, pero siempre me sentí muy atraído por ellas.

Mari Carmen: Pelo rojizo, mejor dicho caoba, rostro pecoso, físico atlético, aparato en los dientes que le hace hablar raro, su forma de moverse es algo poco femenino, pero siempre con buen corazón, aunque su forma de ser es algo tosca y simple.

Ana: La hermana de mi mejor amigo, pelo castaño, cuerpo voluptuoso, muy atractiva, pelo castaño, siempre muy inteligente, un par de años mayor que yo, una adulta con la cabeza muy bien amueblada.

Tamara: Pelo rubio, pelo teñido, extremadamente rizado y corto, con gafitas, cuerpo delgaducho con pocas curvas, culo respingón, siempre usa camisas y tejanos, que cuando cambia de estilo impacta porque casi es otra mujer, carácter manipulador y fuerte. Siempre fue el amor de mi vida.

Estas tres chicas siempre las adore, siempre me sentí atraído por ellas, siempre fueron parte de mis fantasías mas privadas de mi cama por las noche.

Os contare como soy yo, un chico de 1,80, pelo oscuro y canoso, pasado de kilos y carácter algo tímido, mas tímido cuando estoy con ellas tres, por que como dije siempre estuve atraído por ellas.

La cuestión de todo es por cosas de la vida es que me quede solo sin amigos, empecé a salir a tomar unos cafés y saliendo con ellas tres, siendo un bulto que paseaban ya que al estar con ellas siempre me siento reservado y callado, siempre deseando a cualquiera de ellas tres. No era más que su mascota muchas veces, aparte de hacerles algunos favores por el pueblo donde vivíamos los cuatro, Viladecans un pequeño pueblo de Barcelona, España.

Pero empecemos con mi historia que aria que todo cambiara totalmente, físicamente como mi trato con ellas. Como cada tarde llegue a la Cafeteria donde nos reuníamos y al llegar allí las vi a las tres charlando. Las salude y me senté con ellas, me saludaron y como siempre siguieron con sus temas, casi sin poder meter baza en la charla, cosas de chicas yo no entendía nada de eso. Esas risas y esos temas casi me superaban, hacían que estuviera pensando en otras cosas sin prestarle mucha atención, a veces me fijaba en ellas para tener más detalles sus cuerpos, de cada centímetro de sus cuerpos, su comportamiento, como vestían ese día para masturbarme aquella noche, era muy perfeccionista para esas cosas. Casi no me daba cuenta que algunas veces Mari Carmen se fijaba en mí, tan empanado estaba que no me daba cuenta que ella podría sentir algo por mí. Como siempre Tamara la líder del grupo discutía con Ana, las dos con mucho carácter, esa discusión era para saber lo que harían mañana para el día de fiesta, como hacían buen tiempo querían aprovecharlo.

-Iremos a la playa y pasaremos el día...-Dijo Tamara.

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Ana suspiro y le dio un trago a su café:

-Sabes una cosa yo paso de ir siempre discutiendo, prefiero una acampada, ya me diréis como fue todo el día...

Tamara nos miró a mí y Mari Carme:

-Pues iremos los tres, a una cala que me dijeron que está muy bien, está un poco apartada y estaremos a solas los tres.

Asentí con la cabeza ya que siempre decía que si para ir a todos estos sitios, casi no tenía voto por algunas cosas, Mari Carmen asintió con la cabeza:

-Ezpera quierez que lleve mi coche?

Ana sonrió ya que veía como Tamara salía ganando en su debate, veía como lo que decía ella iba a misa:

-Mari Carmen llevaras el coche por que tu eres la única que tiene coche, si fuéramos a la montaña a un sitio precioso yo llevaría el coche....

Al día siguiente prepare mis cosas, me quede algo pensativo, las vería en bikini a las dos, aun hubiera preferido que hubieran sido las tres, no sabría dónde mirar cuando Tamara se quedara con menos ropa, no sabría cómo comportarme, con Mari Carmen estaba más seguro, pero también estaríamos igual, en general y sin más rodeos casi cualquier mujer en ropa de baño me ponía nervioso. Aparte yo tengo que lucir mi cuerpo de obeso, posiblemente me pasara más tiempo con camiseta para taparme un poco.

Dejemos el coche apartado en la carretera y fuimos por un camino que estaba escondido por las montañas, el camino por los años se había llenado de arena de playa, mientras más andábamos mas olia al mar, ese olor salado. Yo como chico tenía que llevar sus cosas, como siempre y yo como siempre callado y siempre asintiendo con una sonrisa y mi buen carácter.

Al llegar a la cala, vimos que Tamara tenía razón estaba totalmente apartada y encima no había nadie por la zona, estaba como virgen, era como si la hubieran olvidado durante décadas, parecía que nadie sabía que existía.

-Oye Tamara como sabias lo de la cala, parece que nadie ha venido a esta cala nunca.

La chica rubia de pelo extremadamente rizado asintió con la cabeza:

-Pues encontré un mapa.

Mari Carmen asintió con la cabeza y dando esos pasos tan machorros:

-Puez ez raro ziempre eztaz con laz mizmaz reviztaz del corazón que yo.

Nos pusimos con las toallas y al sentarme, comencé acariciar la arena tan fina y blanca, allí frente a mí las dos se quitaron la ropa y se quedaron en bikini, eso hizo que me quedara más nervioso, ellas dos mostrando más carne, no sabía dónde mirar. Rápidamente las chicas se pusieron hablar y me sentía más nervioso, me moría de calor viendo sus cuerpos, ese cuerpo tan blanco de Tamara y con la piel tan suave, solo con la mirada me daba cuenta ya que jamás me daría por tacarla, el cuerpo de Mari Carmen pecoso y también bastante atractivo. Comencé a sudar y el agua del mar me llamaba, estaba tan acalorado, que me atreví a darme un baño. Me quite la camiseta y fui a darme una baño. Mientras iba a meterme en el agua escuche como Tamara decía:

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-La única persona con la que no me acostaría en mi vida, que asco.

Lo dijo intentando que nolo escuchara pero lo pude escuchar todo, suspire y me metí en el agua, era tanrefrescante y tan agradable. Sentía algo especial, era raro en mi cuerpo. Laschicas estaban observando cómo me bañaba, como me sumergía y como volví a salirdel agua, como me había pasado extraño. Moví mi larga cabellera marrón castañocomo en los anuncios de champú para elpelo femenino, casi parecía en cámara lenta, llevaba la parte de arriba de mibikini muy apretado pro mis grandes pechos, mi piel morena rápidamente sesecaba y dejando algunas gotitas en mi cuerpo. Mi piel morena era muy suave, llevabala parte de abajo del bikini muy apretado por mi perfecto culo. Me aparte elpelo de mi atractivo rostro. Las chicas se quedaron alucinando no sabía dedonde había salido aquella mujer y donde estaba yo, me quede extrañado y alfinal me di cuenta en mi cambio físico. Me mire las manos, me toque el rostro,me mire los perfectos pechos, negué con la cabeza, era una mujer. No podría ser.

Tamara y Mari Carmen corrieron hacia a mí, me miraron de arriba abajo, yo les mire asustada, me toque el rostro, me apreté los pechos sin saber lo que me había pasado, era una mujer, no podía ser, que clase de transformación es esta.

-Chicas, chicas ¿Qué me ha pasado yo solo me sumergido en el agua y me he transformado en mujer, que me ha pasado?

La chica rubia de pelo rubio corto y extremadamente rizado, negó con la cabeza ya que creía que todo esto era una broma:

-Vamos que clase de broma es esta ¿Dónde esta Raul y quien eres tu?

Yo negué con la cabeza y les mire entristecida, estaba muy asustada ante lo que estaba pasando, me había transformado en mujer:

-Yo, yo chicas no lo entiendo.....Por favor ayudarme.

Carmen me toco un seno y me miro a los ojos, ella se dio cuenta que era yo aquella chica:

-Tamara, Tamara ella ez Raul....

Yo asentí con la cabeza y les mire a los ojos a las dos, era Raul hacerme caso:

-Por favor chicas....

Tamara suspiro y me miro a los ojos, ella también se dio cuenta que era Raul:

-¡¡¡COMO PUEDE SER, TE HAS TRANSFORMADO!!!

Theresa Correa es Raul

Me cogieron de las manos y me llevaron a donde estaban las toallas, me senté en medio de las dos, Tamara y Mari Carmen me comenzaron acariciar el rostro, me acariciaban mi larga cabellera, mi pelo perfecto y sedoso.

-Cómo puede zer que te tranzformez en mujer y llevez puezto un eztrecho bikini?

Yo forcé una sonrisa y me mire las manos, mientras que Tamara y Mari Carmen me tocaban el rostro, la nariz, la oreja, los labios, me tiraban de la oreja, me pellizcaban la mejilla.

-No entiendo chicas, fue meterme en el agua y al salir mi cuerpo estaba así, no lo entiendo.

Tamara me quito la parte de arriba del bikini y las dos vieron mis perfectos y grandes pechos, yo no había visto a un mis pezones, entre las tres acariciábamos la areola, el pezón, las levantábamos un poco para sentir su peso:

-Son tan grandes Raul....-Dijo Tamara.

Yo asentí con la cabeza y mire a Mari Carmen, ella también asintió con la cabeza:

-Siento mis dedos, vuestros dedos tocándome el pecho...

Mire mi otro pecho y lo presione sonriendo.

Cuando más tocaban mi cuerpo más extrañadas se quedaban las dos por ver que aquel chico pasado de kilos y que era tan soso se hubiera transformado en esa mujer tan exuberante de grandes pechos, de medidas increíbles. Tamara pasó sus dedos por mi suave, terso y atlética barriga, Mari Carmen también lo hizo y yo las mire a las dos y también acompañe con mis finos dedos por mi fina barriga.

-No se por qué me transformado en esta mujer, no sé por qué soy una mujer....

Mari Carme metió el dedo en el ombligo y nos miremos las dos a los ojos y sonreímos. La chica rubia de pelo rizado y con gafas, me cogió la braguita diminuta de mi bikini, eran casi dos hilos que se unían y que tapaban a duras penas mi vagina. Mari Carmen y Tamara se miraron a los ojos, me levante un poco ya que no podía ver nada por mis enormes pechos, las dos tiraron de mi diminuta braga y pudimos ver mi coñito. Me lleve la mano a la boca "Y era totalmente cierto era una mujer completa"

Tamara pasó su dedo por mis labios vaginales, Mari Carmen los paso también, yo con curiosidad también lo acaricie, les sonreí y la chica rubia comenzó a frotarme la vagina, sus dedos a mi clítoris. Le mire a los ojos negando con la cabeza ya que estaba sintiendo algo, sentía un placer que comenzaba a nacer en mi cuerpo. Mari Carmen mientras Tamara me frotaba mi coño me cogió de la mano y yo la mire forzando una sonrisa que se estaba transformando en un rostro de placer. Mientras más sentía placer comencé a mover mi cabeza con mi largo pelo, movía mis grandes pechos sin cesar, tocaba mis pechos mientras sentía placer. Mari Carmen aparto las manos de Tamara y ella comenzó a lamerme el coño sin cesar.

La chica rubia de pelo rizado se puso bien las gafas se puso tras de mí y poso su cabeza en mi hombro y me cogió mis grandes pechos:

-Veremos si eres de verdad.

Theresa Correa es Raul

Mari Carmen me lamia el coño mientras que Támara me cogía mis grandes pechos, me pellizcaba los pezones, no cesaba de gritar por el placer que me daba todo aquello, era ser una mujer y sentir un extremo placer como ellas me tocaban sin cesar. Su intento de saber o entender por que me había transformado en una exuberante mujer hacia que me muriera de placer sin cesar. Mi amiga pelirroja con aparatos en sus dientes mientras lamia mi dulce nuevo coño miraba mi rostro, veía como Támara estaba cogiendo mis pechos, los presionaba, los apretaba, los moldeaba en sus manos. Parecían gelatina en sus finas manos.

La chica de pelo rubio, corto y extremadamente rizado con gafas no lo entendía, no entendía lo que pasaba con mi cuerpo, por que había pasado de ser un chico regordete a una mujer exuberante de pechos mas grandes que su cabeza. Yo saque la lengua por el placer del orgasmo. Támara enfadada por que yo tenia un cuerpo que ella desearía tener se levanto enfadada y dejo que yo me quedara tumbada en la toalla.

-Estoy harta voy a buscar alguna bebida fresca, Mari Carmen quédate con ella, maldita sea por que un chico tan asqueroso como Raul se a transformado en una mujer con ese cuerpo....

Támara se fue a buscar una bebida al coche, a la pequeña nevera que teníamos, yo me levante y vi como Mari Carmen se abalanzo sobre mi, poso su cabeza en mi hombro y me miro a los ojos, poso su mano por mi cintura:

-Ez una envidioza a mi me guztaz y me parezes muy atractiva con ezte cuerpo o cuando erez un hombre.

Sonreí al escuchar a Mari Carmen y le acaricie la cabeza, ese pelo rojizo:

-Gracias, gracias Mari Carmen, me gustaría volver a ser un hombre, pero gracias por ser tan comprensiva.

Nos levantemos y me puse ese fino bikini que llevaba cuando salí del agua, tapaba tan poca carne, que era como estar desnuda, muy poca tela para tapar tanta carne que tenia, esos enormes pechos, ese gran culo que gastaba, en fin un cuerpo de ensueño y ser una mujer tan atractiva. Mi amiga cogió la toalla y me cogió de la mano para que fuéramos al coche donde estaba Támara.

Cuando salimos de la cala,del agua salio rompiendo las olas una mujer de pelo castaño, rostro aniñado, con algunas pecas, pelo oscuro, cuerpo muy atractivo sin tener muchas curvas, ella me vio como me iba:

-Hermana...

Támara le dio un trago a su bebida fría y vio como llegábamos a su altura Mari Carmen y yo, ella nos miro con odio, sobre todo a mi ¿Por que tenia un cuerpo perfecto? Ese era el cuerpo perfecto que ella siempre había deseado, maldita sea.

Yo me sentía incomoda totalmente ante lo que pasaba y como Támara me miraba, no tenia la culpa de meterme en el mar y salir como una mujer como aquella, no tenia la culpa de ser una bomba sexual, a mi lado estaba Mari Carmen que le gustaba mi cuerpo, le gustaba cuando era un hombre.

-Yo no tengo la culpa Támara de ser una mujer, solo me metí en el mar y salí así entiendes

Támara le dio un trago a su bebida fría y vio como llegábamos a su altura Mari Carmen y yo, ella nos miro con odio, sobre todo a mi ¿Por que tenia un cuerpo perfecto? Ese era el cuerpo perfecto que ella siempre había deseado, maldita sea.

Theresa Correa es Raul

Yo me sentía incomoda totalmente ante lo que pasaba y como Támara me miraba, no tenia la culpa de meterme en el mar y salir como una mujer como aquella, no tenia la culpa de ser una bomba sexual, a mi lado estaba Mari Carmen que le gustaba mi cuerpo, le gustaba cuando era un hombre.

-Yo no tengo la culpa Támara de ser una mujer, solo me metí en el mar y salí así entiendes

Mari Carmen se puso entre Tamara y yo, yo me sentía casi desnuda con ese diminuto bikini que apretaba mis grandes pechos y apretaba mis carnes, no quería que me marinaran por ser una mujer, quería que me trataran como una amiga ya que era una mujer. Ya me habían lamido bastante para saber si era realmente una mujer de verdad, eso hacia que me sintiera mas confusa, mas dolida que después de manosearme tanto mi amiga no quisiera saber nada de mi, solo por mis medidas.

-Tamara tenemoz que zer buenaz amigaz con Raul, zi ez una mujer tenemos que ayudarla a que ze adapte, tu erez zu amiga, mi amiga ayúdale por favor...

La chica de pelo rubio muy rizado, con esas gafitas me miro, yo baje mis manos y baje mi cabeza por mi timidez, quería que me ayudaran hasta para ser mujer:

-Venga sube en el coche y ya hablaremos, tengo que ser feliz por mis amigas, hasta que un amigo sea una amiga....

Tamara se metio en el coche y cerro de un portazo, Mari Carmen se acerco a mi y me cogio de la mano y me acaricio el rostro:

-Aparte zabe que tu ya no eres un paga fantaz y no eres el chico que se quedo con nosotras por que estabaz soloz, a hora te tiene que tratar como una chica y tiene que uzar las mismas reglaz contigo, ve que facil a sido, me prometez una coza Raul?

Yo levante mi cabeza y le mire sonriendo, estaba feliz, sintiéndome desnuda con esta ropa tan justa pero feliz:

-Si Mari Carmen lo que quieras...

Mari Carmen se dirigió a la puerta del conductor y abrí:

-Cuando vuelvaz a zer un hombre promete que zaldras conmigo....Vale Raul.

Yo me dirigí a una de las puertas del coche y abrir, asentí con la cabeza, tenia que estar acostumbrado a lo que sentía por mi, tenia que a verme dado cuenta que ella la única palabra que conseguía decir con R era mi nombre, eso era amor. Pero yo en el fondo quería a Tamara, Ann y Mari Carmen ellas no me hacian caso pero las quería, pero si volvía a ser un hombre lo aria:

-Si, si claro una cita Mari Carmen.

Theresa Correa es Raul

Me metí en el coche y mire a Támara que estaba en silencio, yo me toque la frente y senti que estaba muy sudada como todo mi cuerpo, que brillaba con el sudor, ese espectacular cuerpo estaba sudado. Mari Carmen se puso al volante y puso la radio, se escucho una de esas cadenas de radio de música flamenca, rumba o otras cosas que odiaba. Cuando estábamos en la carretera Támara me toco el muslo, yo la mire sonriendo ya que parecía que habia roto el hielo y se estaba acercando a mi. Me miro y se acerco a mi, me paso la mano por el hombro y sentí que podía apoyar mi cabeza en su hombro. Me sentía algo mas aceptada. Ella se giro y me miro a los ojos, me puso la mano en un pecho y lo apretó con fuerza, esta exprimiendo mis grandes melones, me hacia daño y le mire:

-Támara, me haces daño...

Támara me miro a los ojos:

-No te alegres, te tengo que meter mucha mano para que seas de las nuestras.....

El coche se paro frente a mi casa y yo baje, Mari Carmen bajo la ventanilla y me miro:

-¿Crees que es buena idea que entres así a tu casa?

Yo me gire y le mire:

-Si, tranquila, soy una mujer y tengo que adaptarme a ello, aparte mis padres estan de vacaciones y necesito estar a solas.

El coche se fue y yo entre en mi casa, suspire al sentir frió por mi diminuto bikini, entre en el servicio y me mire al espejo, me quede sorprendida al ver lo atractiva que era, esos pechos, ese ombligo, esas caderas, esos muslos, ese culo, era una bomba sexual, normal que Támara sintiera envidia de este cuerpo. Mire la ducha y me quede pensativa, todo fue por el agua del agua del mar y si me duchaba y me quitaba los restos dela sal? Suspire y me metí en la ducha, le di que corriera el agua y al tocar el agua mi cuerpo femenino se volvió otra vez masculino. Me sorprendió y comencé a reír, era por el agua del mar, me transformaba en mujer por eso, era increíble.

Esa tarde Támara, Mari Carmen y Anna quedaron en un bar llamado la oficina de la rambla de nuestro pueblo para tomar un refresco, ese día su charla era mas rara ya que las dos amigas que estuvieron conmigo en mi transformación no podían dejar de hablar de aquello, Anna pensaba que estaban locas:

-Espera me estáis diciendo que Raul, nuestro Raul es a hora una mujer de un cuerpo de infarto, que coño os a veis chutado, fumáis porros?

Támara asintió con la cabeza:

-Si con tetas enormes y la puta esta muy buena...

Mari Carmen asintió con la cabeza y cuando escucho lo de puta volvió a negar:

-Oye Támara ella es nueztra amiga y no tendriaz que decir ezo de ella.

Yo llegue al bar donde estaban las tres, estaban en la terraza de la oficina que estaba frente a un pequeño parque infantil con sus columpios y toboganes. Anna me vio llegar y me saludo, miro a Matara y a Mari Carmen:

-Allí esta la mujer perfecta...

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Támara y Mari Carmen me miraron llegar, se quedaron asombradas, me metieron tanta mano, me manosearon tanto mis pechos, me lamieron tanto mi coño que no podían creer que volviera a ser un hombre:

-No puede ser-Dijo Támara.

Mari Carmen asintió con la cabeza:

-Ez increíble pero tengo una cita.

Me senté a la mesa y les mire sonriendo:

-Hola chicas, no se que paso pero fue ducharme y mi cuerpo volvió a su ser, sera como Ramma y al tocarme el agua de la ducha volvió a ser un hombre...

Támara estaba enfadada y se levanto de su silla, Anna sonrió y me miro a los ojos:

-Creo que ella esta enfadada por que yo no me creo nada de esas cosas, dime Raul que te cuentas y que no sea de cine que me aburres.

Mari Carmen me cogió de la mano y yo le mire ella sabia que tendría una cita conmigo, Támara entro en el bar y se quedo pensativa, se apoyo contra la barra y se froto la barbilla "Mar y agua de mar ¿Que le diferencia?" Ella sonrío y la camarera Mirella se acerco a ella para saber lo que quería, una chica de pelo oscuro, ojos claros, con pecas y con poco pecho, pero un culo carnoso y perfecto.

-Hola cariño que quieres?

Támara sonrió:

-Dame dos cosas una botella de agua con el salero y tenéis algo con agua de mar?

Mirella se quedo pensativa y miro una pecera, era de un pez que tenia su jefe y solo podía estar en agua salada:

-Agua de mar? Si no te molesta que sepa a pescado?

Yo no sabia que decirle a las chicas, me intimidaba Anna por que me gustaba y Mari Carmen me tenia algo nervioso por que me cogía de la mano. Támara se acerco a nosotros y miro a Anna:

-Fíjate Anna...

Me tiro agua con sal y me mojo, yo le mire a los ojos enfadada, que estaba haciendo ella?

-Pero Támara que haces?

Támara vio que no me pasaba nada y levanto la ceja, vio como Anna estaba apunto de reírse de ella y echarle la bronca, pero cogió otro vaso con agua de mar de la pecera y me la tiro, esa si que tuvo efecto, mientras me transformaba mi ropa se iba deshaciendo convirtiendose en un ajustado y diminuto bikini, me volvía a transformar en la mujer que me habia transformado en la playa. Me toque los pechos y la cara:

-Pero??

Theresa Correa es Raul

Tamara me cogió de la mano y tiro de ella me hizo que me levantara, se puso tras de mi y apretó mis pechos con fuerza, sentía sus dedos apretujando mis grandes melones, Anna sorprendida se levanto y me abrió mi justo bikini para ver mis pechos, me apretó un seno, me pellizco un pezón:

-No, no puede ser....

Metio su mano por la parte de a bajo de mi bikini y pudo tocar mi vagina, yo me sentí incomoda y se notaba en mi rostro enrojecido.

Yo mire a mi alrededor y sentí como me moría de vergüenza, mire a Anna que seguía con su mano en mi tanga y mire a Tamara que sentía superior al enseñar a todos que tenía razón, mire a Mari Carmen y ella sentía algo de pena por mí. Hice que sacara la mano de mi entre pierna y me tape mis perfectos pechos, negué con la cabeza y salí corriendo con todas mis fuerzas necesitaba desaparecer de todos, estaba muerta de vergüenza. Era una voluptuosa mujer con un estrecho bikini corriendo por la rambla, al correr mis pechos botaban como mis perfectas carnes, corría descalza desesperadamente, dejaba que una lagrima se derramara por mi rostro. Tamara al ver cómo había escapado negó con la cabeza:

-Esa puta dónde va?

Anna le miro enfadada:

-Como siempre para sentirte superior tiene que hundir a cualquiera, manipuladora, será una puta de un cuerpo de infarto pero es nuestro amigo Raul...

Carmen se levantó de su silla y vio como desaparecía corriendo por la rambla:

-Zeguro que ezta llorando por tu culpa Tamara vamoz a buzcarla...

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Fue fácil encontrarme ya que todo el mundo estuvo hablando de una mujer muy atractiva, para los hombres una bomba sexual con unas tetas enormes y que estaba muy buena, para las mujeres una puta sin vergüenza, estaba en un túnel que daba a dos bloques de pisos, estaba escondida de todo el mundo. Allí se acercaron un grupo de adolescentes, estaban alucinando por esa chica de cuerpo tan perfecto y que estaba en bikini. Yo no quería decir nada ya que estaba muerta de miedo. Cuando estuvieron tan cerca de mí se escuchó la voz de Anna no muy lejos de nosotros.

-¡¡¡CHICOS YA LA HABEIS VISTO YA HOS PODEIS IR A PAJEAROS A CASITA, LAAARGAROS!!!

Las tres se acercaron a mi lentamente, yo les mire con pena, odiaba transformarme en chica y quería volver a ser un hombre, Ana me dio la mano y me miro a los ojos, quería darme algo de valor, Mari Carmen poso su mano en mi espalda con cariño, en el fondo siempre me había querido y no quería verme triste. Tamara me veía con los brazos cruzados bastante fastidiada, yo tenía la suerte de tener un cuerpo perfecto y ella jamás lo tendría.

-Venga Raul no pasa nada ¿Cómo volviste a ser un hombre?-Pregunto Ana.

Mari Carmen me sonrió mirándome a los ojos:

-Si dijiste que al ducharte volviste a ser un hombre.

Asentí con la cabeza al escucharlas:

-Sí, si encuentro una fuente me tiro dentro a ver si la sal se va de mi cuerpo y vuelvo a ser un hombre.

Tamara negó con la cabeza al escucharme:

-Ya puedes ser un hombre yo odio que la gente me tome por loca, pero no vuelvas a ser una mujer así, como te odio.

Ana se quedó pensativa y volvió a ver mi cuerpo exuberante:

-Por qué no te vienes a mi casa y te duchas, seguro que volverás a ser un hombre y no sufrirás más.

Las tres chicas me acompañaron a la casa de Ana, la gente me miraba por la forma que iba vestida, solo llevaba un estrecho bikini y el tamaño de mis pechos, de mi culo, de mis largas piernas, también por que iba descalza. Mire a las chicas:

-Porque cuando me transformo en esta mujer siempre es con este bikini?

Tamara me miro suspirando:

-Dirás ese hilo dental para los dientes.

Pude ir a casa de Ana para poder ducharme y volver a ser un hombre normal, ella vivía sola desde hace un tiempo, al menos tuvo y tenía bastante dinero para tener un piso para ella sola. Ella me dijo que me quedara en el comedor por unos instantes mientras miraba como estaba el lavabo, yo me mire en el espejo del recibidor y veía ese cuerpo perfecto de grande melones, culo carnoso, cintura de envidia y mi piel morena, tenía que reconocer que era muy guapa y tenía un sedoso pelo castaño.

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Ana salió del servicio y me miro por unos instantes, yo le mire sonriendo, estaba deseando entrar en el lavabo y ducharme:

-Ya está ¿Puedo entrar?

Ana me miro a los ojos y señalo al sofá:

-Antes de ducharte puedo explorar tu cuerpo, me parece tan increíble que seas así, tengo tanta curiosidad.

Yo tímidamenteasentí con la cabeza y me senté en el sofá, ella se sentó a mi lado y primero comenzóa acariciarme el largo pelo castaño, después me toco el rostro, me tiro de lanariz levemente, me cogió una oreja para sentir lo fina que era, me cogió delos labios apretándolos, sintiendo lo carnosos que eran, me pellizco uncarrillo. Yo le miraba y ella estaba tan intrigada por todo mi cuerpo.

Un pequeño tirón en el hilo del sujetador de mi bikini hizo que mis pechos saltaran y se movieran por el peso, por la gravedad hasta volver a quedarse quietos y moverse por mi respiración, yo respiraba nerviosa al ver como Ana me cogía los pechos, los apretaba con fuerza, yo cerraba un ojo al sentir la presión y el dolor, eran pechos muy sensibles. Me cogió los pechos por los pezones, los levanto tirando de ellos. Me agarre a un cojín al sentir mis sensibles pezones:

-Me-me haces daño.

Ella paso por debajo de mis pechos sus manos y desde ahí los cogió para sentir el peso que tenían, los apretó y yo abrí la boca por lo que sentía, ella me lamio los pezones yo sentía su lengua pasando por ellos, se ponía muy duros. Después paso sus manos por mi estómago, metiendo un dedo en mi ombligo. Al llegar a mi braga tiro del hilo y pudo ver mi coñito, ella curiosa metió sus dedos en mi coño, comenzó a frotar mi clítoris y comencé a sentir placer, se notaba en mi rostro, ella me masturbaba con una manos y con otra me cogía un pecho, era todo por la curiosidad por tener una migo que se había transformado en una amiga.

Me masturbaba también que no deje de gemir, lo hacia también que mis ojos casi se quedaban en blanco, mi cuerpo se cubría de sudor, me dio la vuelta para ver mi generoso y carnoso trasero, me cogió con las manos mis nalgas y las apretó, mordió uno de ellas, me las abrió para ver mi ano, con curiosidad me metió un dedo, mientras que con otro me metía un dedo por el orificio uretral y por el coño, abrí los ojos como platos porque uno de esos orificios era muy estrecho. Ella saco sus dedos de mis orificios y me acaricio la espalda, me tiro con fuerza del pelo. Hizo que mirara hacia el techo con una lágrima en los ojos. Me quede tirada en el sofá agotada, le mire:

Theresa Correa es Raul

-¿Puedo volver a ser un hombre, puedo ducharme?

Anna negó con la cabeza y me miro:

-No ponte tu bikini y te voy a dar ropa para que salgamos de fiesta esta noche..

Suspire y hundí mi cabeza entre unos cojines:

-¿Por qué?

Suspire y me levante poco a poco mi cuerpo desnudo era explosivo, mis pechos, mis muslos, mis caderas, mi culo. Ana me cogió de la mano y me llevo a su habitación, me saco un montón de ropa, tuvimos un pequeño problema al intentar ponerme el sujetador, apretaba y apretaba para cerrarlo y me dejaba sin aire, mis pechos estaban a punto de explotar:

-Ana, Ana por favor no puedo respirar, mis tetas...

Ana negó con la cabeza y prefirió darme una camiseta, que olvidara el tema de ponerme el sujetador:

-Puff cariño tienes las tetas enormes....

-No, no es mi culpa.

Ana saco de un cajón unas braguitas:

-Espero que las bragas se han de tu medida.

Me las puse y sentí como me apretaba bastante, mi culo era enorme y hacia que estiraban bastante las gomas, pero yo no quise decir nada:

-Sí, si me van perfectas.

Me puse unos pantalones tejanos bastante elásticos, Ana se acercó a mí y tiro con fuerza de ellos para poder cerrarlos, sentí su cuerpo contra el miro y sus pechos contra los míos, su calor era tan agradable, ella era un poco más alta que yo. Ella miro si podía cerrarme el botón y yo pude ver su frente con timidez:

-Un poco más y cierra.

Al cerrar el botón me mire al espejo y pude ver mi carnoso culo que estaba de lo más espectacular tan apretado y carnoso. Ana vio aquello y se puso de rodillas y me apretó el culo. Lo toco con deseo, con muchas ganas:

-Joder que culo más perfecto...

-Gra-gracias.

Cuando me puso el pantalón me mire al espejo y vi lo atractiva que era, lo exuberante que era mi cuerpo, el tamaño de mis pechos y esas caderas, esos muslos. En definitiva era como esas mujeres que veía por internet, no quería respirar muy profundamente por si explotaba la camiseta, se rompían los pantalones. Me cogió la cara y me comenzó a maquillar, sentía como se extendía el maquillaje por mi cara, como el pintalabios corría por mis labios, como me pasaba el rímel por mis pestañas.

-Es increíble la mujer tan guapa que eres Raul.

Theresa Correa es Raul

-Tu, tú crees....

Mari Carmen y Tamara llegaron a la puerta de Ana, las chicas habían quedado para salir de fiesta aquella noche, sin contar conmigo como siempre, pero era una mujer más y será una sorpresa si fuera con ellas. Picaron al portero automático y esperaron que le abrieran:

-No teniaz que a ver zido tan mala bicha con Raul, él no tiene la culpa de zer una mujer.....

-Pues lo era y no me gusta que ya que tiene la suerte de transformarse en mujer, tenga un cuerpo de infarto, gracias a dios que no la veré, tampoco veré a Raul no sabes lo asco que meda.

Mari Carmen al escuchar cómo le abrían la puerta paso al portal, negó con la cabeza al escuchar a su amiga:

-Pero ez nueztro amigo Tamara y no ze porque a él le gustas si tú lo odiaz.

-Sí, que asco de tío...

Al salir del ascensor las chicas picaron a la puerta del apartamento de Ana y al abrir me vieron a mí, seguía siendo una mujer, con una camiseta muy apretada que me marcaban mis generosos pechos, como los pezones, los pantalones subidos hasta casi por debajo de mis pechos marcaban mis caderas, muslos y culo. Les mire y sonreí:

-Ho-hola chicas.

Al salir del ascensor las chicas picaron a la puerta del apartamento de Ana y al abrir me vieron a mí, seguía siendo una mujer, con una camiseta muy apretada que me marcaban mis generosos pechos, como los pezones, los pantalones subidos hasta casi por debajo de mis pechos marcaban mis caderas, muslos y culo. Les mire y sonreí:

-Ho-hola chicas.

Mari Carmen me miro negando con la cabeza ¿Tendría que ser a hora un hombre? Ella miro a Tamara que estaba furiosa al ver aquello, no me quería ver como una mujer, con ese cuerpazo que quitaba el hipo. Yo forcé una sonrisa sabiendo que Tamara estaba furiosa por aquello.

-¿Raul no tendríaz que zer a hora un hombre?

Ana apoyo su cabeza en mi hombro y me cogió los pechos, ella sonrió mientras que mis pechos votaban en sus manos:

-Ella se viene con nosotras de fiesta, será divertido tener a otra chica entre nosotras ¿A que esta guapa....?

Tamara suspiro:

-Si como una puta, que asco joder.

Ana miro a Tamara sonriendo:

-¿Es envidia? Si es envidia...

Mari Carmen me abrazo y yo sonreí en medio de las dos chicas:

-Gracias, pero no os acostumbréis me quiero duchar cuando volvamos...

Tamara asintió con la cabeza:

-Eso espero.

Cogimos el coche de Anna, Tamara se sentó de copiloto y yo me quede en la parte de atrás con Mari Carmen, al no llevar sujetador con cada bache, con cada giro mis pechos no cesaban de votar. Mi compañera la pelirroja con aparato en los dientes me cogió de la mano, yo le mire sonriendo, ella me gustaba, me gustaban todas las del coche.

-Seguro que abra muchos chicos-Dijo Ana.

Tamara le miro y sonrió:

-Espero que un tío como Raul se tire a nuestra nueva amiga.

Mari Carmen se fijo en mi veía como mis pechos votaban sin cesar, yo suspiraba al ver como mis carnes se movían por los baches que pillaba el coche, ella no pudo soportarlo mas y me acaricio una carnosa pierna, le mire a los ojos y vi sus manos como iban a mis pechos, los comenzó a acariciar y apretar entre sus manos, yo sentí placer y como mi rostro se enrojecía avergonzada, sentía placer al sentir sus manos en mis pechos, como acariciaban mis sensibles pezones, me comenzó a besar.

Tamara miro por el retrovisor como me dejaba manosear por Mari Carmen, como ella metió sus manos por debajo de mi camiseta y apretaba mis pechos, como yo me tumbaba mientras que ella besaba mi fino, atlético ombligo, sin meterme la mano en mis pantalones me frotaba la entre pierna:

-Te amo tanto Raúl, ezes perfecta…

Tamara tosió y miro hacia la parte de atrás, las dos nos sentemos mejor para que no se notara que yo era siendo conquistada por mi amante pelirroja:

-¿Que estáis haciendo? Raúl la zorra…

Anna sonrió al mirar de reojo a Tamara:

-Seguro que quisieras estar hay atrás con ellas ¿No Tamara?

Tamara negó con la cabeza:

-Callate...En todas las mujeres que se podía a ver transformado Raúl lo hizo en una puta.

Al aparcar el coche en los aparcamientos de la discoteca “XQue” Yo baje lentamente, sentía frio con la poca ropa que llevaba puesta, sentí como muchos chicos me observaban ya que era una bomba sexual, Anna se encendió un cigarrillo y Mari Carmen también se lo fumarían antes de entrar a la discoteca. Tamara se cruzo de brazos mirándome, yo me sentía como si estuviera en otro planeta por lo observada que estaba, sentí que tenia ganas de orinar y mire a las chicas, no había ido aun al servicio como una chica y me sentía perdida:

-Chicas alguien me puede acompañar al servicio por favor…

Anna miro a sus amigas y antes que Mari Carmen pudiera tirar su cigarrillo para ayudarme Tamara me pego un fuerte empujón:

-Venga puta de tetas grandes iremos al servicio…

-Vale, vale..

Mientras andábamos por el parking yo mire a Tamara mientras me frotaba el brazo, quería saber por que me odiaba tanto:

-¿Tamara que te pasa conmigo? Yo no tengo la culpa de ser una mujer.

Ella me miro de arriba a bajo, me odiaba por tener ese cuerpo que tenia, ella deseaba tener un cuerpo tan exuberante pero lo tenia un chico, un chico que al meterse en el mar salio convertido en una mujer:

-La culpa es tuya Raúl, por que saliste con las medidas que yo siempre había deseado, maldita sea….

Baje la mirada al suelo ya no sabia que contestarle ya que la quería, quería a todas, pero no sabia como conseguir que me dejara de odiar, no tenia la culpa que me pasara eso con el agua del mar, no era mi culpa.

Al llegar al lavabo que estaba en la puerta del XQue, yo entre en uno de los servicio y me baje los pantalones, era tan raro acostumbrarse a este cuerpo, era tan raro eso de sentir como salia de mi vagina la orina .Amiga estaba esperando fuera y se quedo pensativa, pensando en mi cuerpo tan exuberante que tenia, cada vez que pensaba en mi cuerpo mas rabia le daba.

-Ya has terminado tía…

Yo salí del servicio y me mire al espejo, ella negó con la cabeza y se acerco tras de mi me cogió con fuerza los pechos, aprentandolos tanto que me dolía, dándome golpes con sus caderas:

-No te mereces este cuerpo Raúl, eras un tío gordo y asqueroso, encima estabas enamorado de mi, no te lo mereces….

-Tamara, Tamara me arrancaras las tetas para, para por favor.

Al salir delos lavabos yo tenia los ojos llorosos y Tamara seguía enfadada conmigo, no me merecía ese cuerpo que tenia, para ella era injusto.

Mari Carmen me cogió del brazo y me miro a los ojos, ella me sonrió y me dio cariño, yo me sentí tan a gusto y comencemos andando hasta la entrada d ella discoteca:

-Vamos caziño nos espeza el XQue..

Tamara vio como movía mi perfecto culo y suspiro amargada, Ana miro a su amiga:

-¿Has visto el cuerpo que tiene nuestra amiga? Se acercaran muchos hombres a ella y nosotras podemos ligar con alguno, ella es la red y nosotras las pescadoras.

Pose mi cabecita en le hombro de mi amiga, mientras que mis perfectos y grandes pechos votaban al paso que daba, me sentía a gusto con ella, aunque todos los chicos me miraban y me deseaban al llegar a la cola. Mari Carmen me acaricio el pelo castaño y me acaricio la barbilla:

-Ezes tan guapa Zaul…

-Tu, tu crees?

Ella me beso y sentí sus labios contra los míos, eso hizo que lanzara una largo suspiro, ponernos en la cola para entrar sentí unas manos femeninas tocando mis perfectos pechos, me gire y sonreí, era Ana que le gustaba tanto mi cuerpo femenino:

-Tenemos aquí a la chica con la mejor delantera….

Tamara refunfuño al escuchar aquello:

-No es para tanto….

Estaba nerviosa al llegar a la entrada de la discoteca, el problema era es que si me pedían el carnet de identidad solo tenia cuando era un chico, como explicarle que era a hora una chica como aquella, por eso estaba muy nerviosa, Mari Carmen me cogió de la mano y Ana también lo hizo.

El vigilante que pedía los carnets y decidía si entrabas o te fastidiabas perdiendo una noche de fiesta me miro de arriba a bajo, sabia que si entraban mujeres tan exuberantes como yo muchos mas chicos querrán entrar para poder ligar conmigo, el sonrió y no me quiso coger el carnet, eso hizo que respirara con tranquilidad.

Ana sonrió mirando al vigilante y miro a Mari Carmen y a Tamara:

-Oye que si entra nuestra amiga Mar entramos nosotras.

Al entrar me lleve la mano al pecho estaba algo sorprendida ella me había llamado “Mar” Era un nombre bonito y tan acorde de mi maldición de cambio de cuerpo por bañarme en agua salada:

-Me gusta ese nombre.

Ana y Mari Carmen me llevaron a la pista de baile tras de nosotras iba Tamara refunfuñando por mi culpa, por ver ese culo tan carnoso como el mio se movía.

Al entrar en la pista de baile ellas me rodearon y comenzaron a bailar, me miraron con una sonrisa y Mari Carmen con sus caderas golpeo las miás, eso me hizo sonreír ya que me sentía bastante bien con ellas, Ana levanto sus manos y se movió sensualmente:

-Venga Mar tu también puedes ser muy sensual, baila para nosotras, para todos.

Yo intente imitar a Ana, no lo entendía pero sabia bailar de una manera muy sensual, era por mis curvas de infarto que me daban ese toque tentador.

Tamara pidió una cerveza en la barra y mientras se lo tomaba de acerco una amiga a ella Lorena, una chica que tampoco me soportaba cuando era un chico, lo mejor dicho no me soportaba por existir, así de feminista era, una chica rubia de cuerpo regordete y siempre con mal carácter:

-Hola Tamara que haces aquí?

-Hola Lorena, Ana y Mari Carmen me convencieron para venir a la discoteca para que pudiera lucirse Raúl que se transformo en mujer, el asqueroso se transforma en mujer cada vez que se baña en el mar o agua con un poco de sal.

Lorena levanto la ceja:

-No me jodas y donde esta.

Tamara me señalo y Lorena pudo ver como bailaba con mis amigas, como movía mi cuerpo perfecto de curvas de infarto, como lo estaba pasando bien con aquello, con estar tan a gusto con Ana y Mari Carmen:

-Sera puta, con lo asqueroso que era de tío que tenga un cuerpo así…

Tamara asintió con la cabeza:

-Mmm, tengo una idea para joder a Mar, a hora se llama así, acompañame.

Ana se llevo la mano a las caderas y sonrió al ver como los chicos se fijaban en mi, como me deseaban todos, ella hizo un gesto para que todos le vieran, como diciendo “Ella tiene sed” Yo no me di cuenta de aquello ya que me divertía con Mari Carmen.

-Mar por que no vas a pedirte algo para beber..

Yo asentí con la cabeza moviendo mi pelo castaño y sedoso, me moví entre la gente y fui a la barra de bar, allí la chica en bikini me comenzó a dar cubatas y cubatas, yo no había pedido ninguno, era todo invitado por los chicos, eso me dejo asombrada:

-Pero, pero…

Cargada de cubatas me acerque a Ana y a Mari Carmen ellas cogieron sus bebidas, brindaron por mi, eso me a vergonzo al sentirme como el centro de todo, me sentía también deseada por tantos hombres, eso me daba miedo ya que no quería que me tocaran, me metieran mano. Mis dos amigas me cogieron por la cintura me rodearon y me comenzaron a besar, yo me sentía tan a gusto entre ellas, hasta que vi a una persona en el rincón de la discoteca ¿Podría ser ella? Era Mari Mar una chica que salí hace años, eso creía , pero para ella jamas fui nada mas que un amigo.

Yo fui hacia ella bajo la mirad de Mari Carmen y Ana, la primera quiso ir tras de mi, pero su amiga le cogió de la mano para que me dejara tranquila:

-Deja a Mar.

-Si pezo…

Mari Mar estaba como siempre atontada en su mundo, esos ojos verdes risueños parecía que no estuviera allí, estaba en su mundo anti social totalmente, es una chica muy alta y con un cuello tan largo y hermoso, algo que siempre me ponía, un cuerpo con las curvas justas, era tan sorprendente verla allí ya que ella no era muy social:

-Hola Mari Mar…

-Hola..

Yo sonreí y negué con la cabeza ya que parecía que no me estaba haciendo ni caso estaba como en su mundo:

-¿Sabes por que te conozco?

Ella negó con la cabeza como si no fuera por ella, no sabia por que me había acercado a ella pero también pasaba de mi, pasaba de todos:

-No..

Yo le mire a los ojos y me apretando mis pechos nerviosa, era increíble que fuera de esa manera, que no había cambiado su pasibilidad de su pasotismo:

-Soy Raúl, me transforme en mujer, Mari Mar, soy a hora una mujer ¿Lo entiendes?

Ella no se sorprendió mucho ante la idea que yo me hubiera transformado en mujer, en esa chica tan voluptuosa, que me transformaba con agua salada, me acaricio el pelo y me sonrió, era tan extraña su expresión, se creía mi transformación pero le gustaba mi cuerpo.

-Eres muy guapa Raúl…

Negué con la cabeza al escucharle:

Theresa Correa es Raul

-Me llaman a hora Mar..

Ella sonrió pasando mi mano por mi cintura, ella era algo mas alta que yo y comenzó a besarme el cuello, era increíble su reacción tan extraña y artificial, sin entender sus sentimientos, eran extraños, pero la forma que me cogía las nalgas y me besaba el cuello, me hizo darme cuenta una cosa, siempre le había gustado las mujeres y jamas le había gustado como hombre.

Ana y Mari Carmen se acercaron a nosotras y se quedaron mirando como me metía mano, como me besaba, Mari Mar les miro y sonrió:

-Ella es muy guapa.

Ana tiro de mi mano y me pego contra su cuerpo, también me cogió de las caderas y me beso, yo baje la mirada y le mire a ojos:

-Ella es Mari Mar una ex novia, siempre fue muy rara y creo que le gusto mas como mujer, es un poco anti social.

Ana sonrió y me paso a Mari Carmen, nos miremos a los ojos y nos besemos, ella lo hizo con mucha ternura, la mayor de las tres se acerco a mi ex y poso su mano en su hombro, le miro a los ojos con una sonrisa:

-Yo soy Ana, ella es Mari Carmen y Mari Mar si eras ex de Raúl y te gusta como Mar bienvenida a nuestro grupo de amigas..

Mari Mar se acero a Mari Carmen y a mi mientras nos besábamos y me cogió de la cintura, y también me beso el cuello. Pego un pequeño tirón y nos separo, me siguió besando el cuello mientras manoseaba mis perfectos y grandes pechos, con otra mano bajo hasta mi pantalón y metió su mano por debajo, llegando a mis bragas y después a mi coño, lo comenzó a frotar sin cesar, yo sentía sus deditos tan largos y finos como me frotaba.

-Dios mio como aprendiste trucos de lesbiana el tiempo que no nos veíamos…..