El chico intento salir pero la puerta ya estaba cerrada, suspiro amargado y miro a su alrededor, le gustaba aquel lugar y era irónico que pasara la noche allí. Recordó su experimento y cuando fue a buscarlo, al abrir el armario donde estaba hubo una explosión de gas rosita, al recibir todo ese impacto cayo al suelo, cayo al suelo una chica rubia carnosa y de cuerpo voluptuoso al suelo, cayo sin conocimiento.
La chica rubia se levanto poco a poco, se llevo la mano a la cabeza dolorida por la explosión no entendía lo que habia pasado, solo habia experimentado con unas braguitas y no habia usado ninguna clase de explosivos, era una locura. Joseph al tocarse la cabeza sintió que tenia el pelo mas largo, largo y suave, pelo rubio que se colaba entre sus dedos. Asustada se toco el rostro era mas redondo y suave, eso comenzó a asustarle ya que no se reconocía el rostro, miro su pecho al sentir una gran presión por su camisa y vio u escote femenino, dos pechos presionados por los botones, la resion hizo que saltara un botón. La chica se levanto y se toco las caderas, el culo. Se llevo las manos a esos grandes pechos:
-No puede ser soy una mujer, mi voz ¿Que me a pasado, por que me he trasformado?
AL llevarse las manos a los pechos los demás botones de su camisa saltaron y pudo ver como esos dos grandes pechos caían por su propio peso, rompiendo su prisión, el chico se las toco sintiendo el placer de tocárselos, la sensibilidad de sus pezones. El rostro de la chica cambio por el placer de tocarse, pero ngo con la cabeza ya que no podría ser ¿Seria un sueño? Se pellizco en un brazo, en esa piel tan fina y suave dejándose un moratón:
-No es un sueño, soy, soy una chica.......No puede ser.
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